Cuando acudes a un evento, normalmente no arderás en llamas por cometer los siguientes errores comunes, pero procura evitarlos para tu propio disfrute:
- No informarse bien del estilo. Para participar en algún evento es mejor informarse bien de las características de ese evento y no simplemente dejarse llevar por la premisa. No hay que asumir que hay un solo camino para hacer eventos, ni que una misma organización siempre los hará de la misma manera o con los mismos elementos. A menudo en la web que lo anuncie encontrarás algún tipo de documento de estilo que señala el de ese evento, con sus particularidades. Si no es así, es mejor que preguntes directamente a la organización para asegurarte.
- No ser fiel al personaje. Esto no significa ser esclavo de lo que se te haya descrito de antemano. Un personaje es un proceso en evolución y puede cambiar sus motivaciones y perspectivas si tiene razones para ello. No se es fiel al personaje cuando no se interpreta y se asume como una personalidad temporal, o cuando se hace a medias.
- No crear contenido. Una guía de personaje puede ser detallada, pero nunca será exclusiva ni excluyente. Si se te ocurre cualquier contenido, incluso en el propio evento, y éste no contradice ni la ambientación ni la coherencia de tu personaje, úsalo y compártelo con los demás. Por ejemplo, si interpretas a un especialista en comercio y economía en un evento que no le da importancia a esos asuntos, puedes crear y generar todo tipo de material adecuado y comentarlas con quienes hablen contigo, siempre que eso no se convierta en lo más importante para ti en el evento.
- No usar autorreferencias cuando son apropiadas para el personaje. Tienes un fondo enorme del que tomar experiencias y material: tu pasado. Cuando no sabes de qué hablar no hace falta que caigas en un incómodo silencio: puedes transformar alguna de tus experiencias por el marco de la realidad ficticia: ese viaje a Praga que te dejó fascinado puede convertirse en un viaje exótico a algún lugar adecuado.
- No ser su propio director. Tú eres la persona más cercana a ti mismo, así que la iniciativa es tuya. No esperes que nadie te diga cuándo actuar, ni qué hacer. Cuando el evento acaba, la realidad ficticia desaparece y puede que te hayas quedado con ganas de hacer algo - ¡ya es imposible! Esto es especialmente importante en un evento inmersionista puro. En un evento con elementos narrativos, se te habrán dado previamente las pautas por las que puedes ser dirigido, si es que las hay.
- No informar a la organización previamente. Si tienes dudas, problemas, o cualquier particularidad, comunícate con la organización cuanto antes para avisar de ello y que puedan prepararse para cualquier contingencia.
- No prestar atención. Todo lo que los organizadores consideran importante que sepas suelen escribirlo en su web, y a veces envían correos directamente. Esto puede ir desde cambios e incidencias, hasta consejos de vestuario.
Yo añadiría "no evitar el metajuego" y "no ver la diferencia entre personaje y jugador".
ResponderEliminarRespecto al metajuego debemos tener en cuenta que siempre es mucho más emocionante averiguar contenidos en partida que fuera de ella (hay miles de batallitas que contar ¿por qué tenemos que caer en el error de hablar precisamente de información que nuestros personajes desconocen?).
Eso, unido a que no todo el mundo es capaz de separar lo que sabe su personaje y lo que sabe como jugador, lleva a que no se actúe de forma natural y que el personaje no fluya con el evento sino con ocurrido en los intervalos.
La "no separación entre pj y jugador" lleva como dificultad añadida que las amistades y enemistades puedan trascender y conduzcir a pjs incongruentes y poco consistentes.
En cuanto a los demás puntos de tu post no tengo nada que objetar. Supongo que mis pelucas entrarían en el punto 1º jajajajaja :P
Lo de las autorreferencias es una cosa a la que me he enganchado últimamente. Utilizando el ingenio, puedes contar anecdotas de cuando hiciste de explorador en otro rol en vivo, como si fuera tu pasado.. O como bien dice Juan, tu viaje a Praga.. Me vino muy bien cuando justo acababa de volver de viaje y hacía tiempo que no veía a mis amigos (que eran pjs) y estaba deseando de contarles cosas y ellos de preguntarme.. Y las utilicé en un rol en vivo con tintes bohemios y decadentes, narré con todo tipo de detalle la juerga real que me había pegado, disfrazando la realidad con ingenio para que sea coherente con tu pj, con la ambientación. Me parece muy enriquecedor.. y que puede servir para llenar esos silencios, conversaciones banales o momentos de taberna, que era este último caso. ;)
ResponderEliminarPor desgracia un jugador que no se mira la web del evento al que va a asistir difícilmente estará leyéndose un blog sobre teoría de los roles en vivo...
ResponderEliminarBueno, esto está más enfocado a la aplicación práctica que a la teoría.
ResponderEliminarEn cualquier caso, enviarle al correo algún texto parecido o un enlace a éste cuando se inscriba no estaría de más.
De acuerdo con todo lo dicho.
ResponderEliminarPara mi diferenciar entre personaje y jugador es lo más difícil. Como narrador no tengo ningún problema en inventar personajes para otros, pero como jugador me cuesta crearlos para mi mismo. Por ello cuando voy a una partida en la que no me han dado un personaje concreto tiendo a ser yo mismo. Siete años de experiencia a mis espaldas y me volvió a pasar en mi último Larp. No conocía bien el idioma, ni a la gente y acabe siendo un José en un vivo postapocalíptico (así que intente al menos hablar poco)
Y Nuria, tus pelucas molan :-D
A mi me pasa exactamente lo mismo que a Zuell. Crear pjs para mi mismo no me resulta fácil, y si he dado unas sugerencias de caracter que luego no se ven reflejadas en la hoja de pj, tiendo a no utilizarlas.. y la mayoría de las veces no tienen los suficientes detalles de interpretación como para sentirte otra persona. Eso y que el resto de los participantes no den la importancia debida a la inmersión, hacen que en mi caso, sea más Jesús y menos el pj.
ResponderEliminar