A diferencia de otras entradas, ésta consiste en un ejercicio práctico. La finalidad es apreciar mejor la inmersión en el personaje en la medida en la que uno mismo puede procurársela. En un rol en vivo no existen los tiempos muertos, nunca; que no haya escenas programadas o no parezca que está pasando "algo" no significa que haya que salir del personaje. A no ser que la organización lo pida expresamente, no hay que hacerlo y, si te da lo mismo, al menos no hagas salir a otros con tus acciones o comentarios: te lo agradecerán.
Y tras este consejo, el ejercicio.
Considera el entorno en el que vives y te mueves.Toma nota de las rutinas, de los hábitos, de los patrones de pensamiento en los que caes y de las relaciones sociales que mantienes. Haz una lista de cómo eso variaría para el personaje en el que quieras sumergirte.
Crea una identidad paralela. No una completamente alternativa, sino una versión distinta de ti mismo que pudiera vivir en nuestro mundo. En realidad, no tendrías que limitarte a esto y, si sales de la ciudad, puedes ser todo lo radical que quieras, pero para empezar no lo hagas demasiado difícil.
El personaje que vas a interpretar debe tener un trasfondo, unas motivaciones, unas pautas de conducta y valores. Puedes escribir un poco sobre esto, pero lo importante es que te puedas llevar su núcleo sin esfuerzo a cualquier parte. Si te sirve de apoyo, puedes emplear también esta otra entrada para cuando quieras interpretar de manera externa el personaje.
Ahora necesitas algo de tiempo libre. Una hora está bien, aunque puedes aumentarlo. Vístete como lo haga tu personaje y practica sus detalles externos unos minutos hasta que los puedas mantener sin mucho esfuerzo. Después, cambia de entorno. No te quedes en casa, no vayas a los lugares que más frecuentes. Busca sitios por donde vayas poco, sean exteriores o interiores y haz un esfuerzo en entrar en el personaje. Por ejemplo, puedes empezar pensando sobre un asunto que le preocupe de los que has escogido en las motivaciones, o sobre un recuerdo que se le haya despertado del pasado, tomado de su trasfondo. Puede que quieras mantener interacciones cortas con otros, aunque evita mentirles o implicarlos demasiado, ya que éste es un ejercicio en solitario.
Mantener este estado hace que comprendas mejor al personaje, que lo hagas más "tuyo" y que no sea un esfuerzo obtener material. Bien desarrollado, no te hará falta volver a mirar la guía de personaje durante los eventos.
Cuando asistas a un rol en vivo, sólo tienes que realizar tu ejercicio de inmersión unos momentos antes de comenzar y mantenerlo durante todo el evento. A veces, querrás estar solo dentro de personaje y otras querrás relacionarte con los demás personajes. Todo es legítimo, mientras lo hagas según la preferencias, carácter y motivaciones del personaje y no según las tuyas.
¿Puedo añadir algo? Y dentro del rev o evento no sólo actúes para los demás. Hazlo también para ti mismo, o para el ambiente, aunque nadie te observe, sigue en ello. Te pongo un ej. Sábado por la mañana, a eso de las 7 AM, mi pj había estado dando vueltas a una decisión crucial en su destino y afrontó la consecuencia. Me maquillé, vestí, hice las lustraciones previas y todo el ritual. En la más completa soledad de una mañana maravillosa. Nadie se enteró apenas, simplemente, me dejé caer por la habitación de mis dos principales aliados tras todo ello. Fue una de las escenas más onanistas y apasionantes de mi carrera rolera.
ResponderEliminarP.
Por supuesto, puedes añadir lo que quieras :)
ResponderEliminarOpino que la inmersión en el personaje precluye la actuación. Cuando uno se sumerge, no está pensando en representar nada, simplemente es aquello en lo que realiza la inmersión. La esencia prevalece sobre la apariencia y lo que comentas es un ejemplo de rol de uno solo.